Varias teorías sustentan el estudio de la psicología humana y constituyen la base para identificar el comportamiento humano, los tipos de personalidad y los trastornos mentales.
Algunas teorías de la psicología incluyen teorías conductistas, humanistas, biológicas, cognitivas, de personalidad y psicoanalíticas.
El finalismo ficcional forma parte de la teoría de la personalidad y tiende a señalar qué constituye la personalidad de una persona.
En este artículo, nos centraremos en ficticio Finalismo y otra información relacionada que necesitas saber. Así que sigue leyendo de principio a fin.
¿Qué es el finalismo ficticio?
El finalismo ficticio es una meta o ideal inconsciente. Es una meta futura que una persona aspira a alcanzar y, por lo tanto, dirige su estilo de vida para alcanzarla. Alfred Adler lo postuló en su teoría de la personalidad.
También depende de la teoría de que los seres humanos están más motivados por las posibilidades futuras y las metas o ideales que esperan alcanzar que por sus experiencias. Sin embargo, a lo largo del tiempo se han hecho ajustes a la teoría.
Según la primera forma de la teoría, las personas siempre tendrán problemas, conflictos o inferioridades, por lo que tu personalidad se reflejará en cómo superas o no los problemas.
Pero Adler lo rechazó más tarde como motivo básico y consideró que el centro de la personalidad de una persona era la conciencia.
Sin embargo, en cada ser humano subyace un afán de perfección, por lo que toda acción o conducta humana es un intento de alcanzar el finalismo ficticio.
Índice del contenido
¿Qué genera el finalismo ficcional?
La teoría de la personalidad de Adler infiere que el finalismo ficticio comienza desde la infancia de una persona. Infiere que un niño depende de sus padres, por lo que la dependencia hace que estos se sientan inferiores. Para superar el sentimiento de inferioridad, se esfuerza por alcanzar la superioridad.
En otras palabras, una meta ficticia de éxito comienza cuando un niño intenta superar sus sentimientos de inferioridad. Tales metas se convierten en una guía. Novela histórica o Ficción En la vida actual de la persona, la imagen del éxito futuro que tiene en su mente le ayuda a superar las dificultades del presente.
El desarrollo del finalismo ficticio en el niño depende de su posición en la familia. A partir de esta teoría, Adler utilizó el caso de una familia con tres hijos. niños.
El primogénito de la familia se siente privado con la llegada de otro hijo. Siente que ha perdido sus privilegios, por lo que intenta sobrevivir de forma independiente sin necesidad de afecto. Esto suele llevarlo a buscar el liderazgo.
El segundo hijo suele rivalizar y competir con el primero, por lo que se fija metas elevadas y suele triunfar.
Pero el último hijo depende de los hijos mayores y la dependencia puede llegar a ser demasiado alta.
Sin embargo, es posible que desee ser independiente, lo que creará un conflicto interno.
Por otro lado, un hijo único en una familia suele ser egocéntrico y adicto. Cuando crece y ya no es el centro de atención, suele tener dificultades para relacionarse con sus iguales. Sin embargo, los estudios empíricos modernos no están de acuerdo con esto. Por lo tanto, un hijo único es emocional y socialmente estable como los demás niños.
Además, los objetivos son diferentes según el individuo, por lo que el afán de superación permite a una persona evolucionar de una etapa de su vida a otra.
La incapacidad de una persona para alcanzar el objetivo principal puede dar lugar a algunos trastornos psicológicos como el complejo de superioridad o el complejo de inferioridad.
Datos sobre el finalismo ficticio
Las personas, consciente o inconscientemente, trabajan para alcanzar un fin ficticio. Por lo tanto, cada pensamiento, emoción o acción de ese individuo empuja hacia la consecución de los objetivos.
Existe una unidad entre los objetivos de superación personal y el finalismo ficticio (imagen del yo perfecto). Así, el finalismo ficticio une el impulso de superación personal, el inconsciente y el consciente, para formar el impulso de la personalidad.
Los sentimientos de inferioridad malsanos en un individuo reflejan un finalismo ficticio malsano. Por lo tanto, el grado en que una persona realiza sus potenciales depende del grado de libertad de pensamiento, expresión, opinión y acción. Por lo tanto, el finalismo ficticio de una persona determina la naturaleza de sus sentimientos de inferioridad.
Los sentimientos de inferioridad se refieren a los sentimientos que se presentan cuando una persona carece de autoestima. Sin embargo, los sentimientos de inferioridad pueden ser saludables o no saludables. Los sentimientos de inferioridad saludables hacen que la persona avance, mientras que los no saludables hacen lo contrario. Los sentimientos de inferioridad no saludables también se conocen como complejo de inferioridad.
Las personas con un complejo de inferioridad generalmente se vuelven perezosas, dubitativas, indefensas o sobrecompensadoras.
La sobrecompensación se refiere a cuando una persona intenta ocultar su sensación de inferioridad ante sí misma y ante los demás. Por lo general, lo hacen exagerando sus éxitos y cualidades cuando hablan de ellos. Además, suelen estar preocupados por el materialismo, el estatus y el poder, ya que lo ven como superioridad.
Las personas con sentimientos de inferioridad saludables tienden a desarrollar nuevos talentos y adquirir nuevas habilidades.
El objetivo de superioridad es el finalismo ficticio último que motiva a las personas. La superioridad es el estado de satisfacción. También puede ser la realización de un objetivo político, financiero o cultural. Es el factor motivador de las acciones en pos del finalismo ficticio.
La utilidad de Finalismo ficticio
Útil en la realización de la terapia: La utilidad del finalismo ficticio se pone de manifiesto cuando un terapeuta utiliza la teoría de la personalidad. Identificar el finalismo ficticio puede ayudar a determinar los sentimientos de inferioridad y ansiedad de un paciente.
Fomentar el crecimiento personal entre los individuos: Incluso después de la terapia, las personas pueden mejorar su autoestima y construir mejores relaciones. El finalismo ficticio también puede ayudar a las personas a revisar su concepto de una vida satisfactoria.
Conclusión
El finalismo ficticio tiene su origen en la teoría de la personalidad, que afirma que las personas adquieren su personalidad desde la infancia. Sin embargo, el objetivo es el objetivo. Debes saber que los hechos que sustentan este concepto no deben generalizarse; puede haber excepciones.
Finalmente, el finalismo ficticio no es sólo parte de una teoría, sino que juega un papel en la terapia y puede ayudarte a definir lo que satisface tu vida a medida que continúas el viaje de la vida.