El prólogo, el prefacio y la introducción de un libro tienen sus propios propósitos distintos. Si bien las tres secciones son únicas, existen para crear una conexión emocional entre el lector y el libro.
El prólogo
Un prólogo está escrito por un autor invitado y describe por qué debería leer el libro. Un prólogo bien escrito por la persona adecuada puede aumentar tanto su plataforma como las ventas de su libro. El objetivo principal del prólogo es presentar al autor y al libro al lector y tratar de establecer la integridad de ambos. En general, no proporciona ninguna información adicional sobre el tema del libro, sino que solo sirve como un recordatorio de por qué uno debe continuar leyendo.
Si sigue la ubicación aceptada de un prólogo en la publicación, se encuentra después de la “Tabla de contenido”, y las páginas se etiquetan con números romanos en minúsculas (por ejemplo: i, ii, ii) en lugar de números arábigos que se utilizan en el resto del libro.
El Prefacio
El prefacio está escrito por el autor y cuenta a los lectores cómo se desarrolló el libro y por qué. Esta sección debe construir la credibilidad del autor, así como del libro. En el prefacio, el escritor proporciona una visión general sobre las razones para escribir el libro, así como el alcance del tema. Además, debe demostrar que vale la pena leer el libro. El prefacio se coloca con mayor frecuencia después del prólogo. A veces un prefacio incluye agradecimientos.
La Introducción
Esta sección puede ser escrita por un editor o el autor, e introduce el tema del libro. En la introducción, el autor prepara a los lectores sobre lo que pueden esperar en el libro. Es la oportunidad de un autor para captar la atención de la gente y aumentar su deseo de continuar leyendo todo el libro.